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MÉXICO, DF, 11 de octubre de 2014.- Personas del movimiento #YoSoy26 marchan del Zócalo a Los Pinos, para defender el papel de la fuerzas armadas en la lucha contra la delincuencia organizada.
Convocados por la organización Humanista por el Progreso Social, los integrantes del grupo conformado por cerca de 100 personas portan un moño verde olivo en apoyo a los militares, así como pancartas en las cuales le reclaman a Enrique Peña Nieto por no defender a los militares sobre las acusaciones de presuntas violaciones a los derechos humanos.
Sin mencionar su nombre completo- al igual que la mayoría de los manifestantes- Rocío dijo venir de Cuatitlán Izcalli, negó tener familiares en Ejército sino que viene como civil a apoyar porque simpatiza por la lucha que mantienen los militares contra la delincuencia y auxilian a la población en caso de desastre.
“Nos molesta esta injusticia porque castigan a quienes nos defienden y luchan contra los narcotraficantes movidos por Estados Unidos”, sostuvo la mujer.
Al igual que los demás manifestantes coincidió en que los 14 militares por el caso Tlatlaya sólo recibieron órdenes.
¿Cuántos militares han muertos en apoyo al país y no se ha hechos justicia?, cuestionó.
La marcha pasará por 5 de Mayo y Avenida Juárez en sentido contrario, y ocuparán un solo carril, aunque su intención original era usar dos, pero la Secretaría de Gobierno capitalina los convenció de usar sólo uno para no afectar el tránsito vehicular.
Injusto el trato a militares que cumplen órdenes
Uno de los participantes del movimiento #YoSoy26, es César Gutiérrez Priego, hijo del ex zar antidrogas Jesús Gutiérrez Rebollo, quien fue sentenciado por mantener vínculos con la delincuencia organizada y murió en una cárcel militar.
El vástago del general mencionó que en este sexenio, es donde supuestamente se han registrado el mayor número de deserciones debido a que el personal militar sólo tiene esta opción cuando tiene que cumplir una orden que atenta contra los principios éticos.
Lamentó que los militares sean castigados por cumplir las órdenes de sus superiores y no tengan ninguna defensa ante estos hechos.